Nací en una franja y angosta faja de tierra. Emigré al país de las “zetas” donde vivo de lo que más me gusta: crear, dibujar, diseñar, jugar, ayudar a otros autores.
Nadie dijo que fuera fácil, tal vez por eso tardé tanto en dar el paso y dedicarme al mundo de los cuentos. Y ahora, después de muchos aprendizajes aquí estoy, escribiendo una biografía que me hace reflexionar lo feliz que soy “haciendo lo que hago”.
Miro hacia atrás y veo varias obras publicadas como El Abrigo de Jana, La colección Tintineo, El recetario Mágico, 8 patas, Los colores olvidados, entre otros ¡vaya! Sí que he recorrido un bonito camino y todavía tengo la sensación de estar empezando.

Nací en Asturias, un paraíso natural repleto de montañas, trasgus y xanas. Crecí rodeada de fantasía e imaginación, gracias a mi madre que era una gran narradora de historias. Los animales y la escritura se convirtieron en mis pasiones pero, como no creía que se pudiera vivir del cuento, estudié la carrera de Derecho. El destino hizo que me trasladara a vivir a Valencia, donde trabajé y fui voluntaria muchos años en una protectora de animales para la que escribí también varios relatos. Posteriormente fui madre de dos musas, las cuales dispararon mi imaginación y creatividad y me empoderaron para cumplir mi sueño. Desempolvé escritos antiguos, creé historias nuevas, me lancé a la autopublicación y fundé mi propio sello editorial.